¿Cuánto
tiempo hace que escribes poesía?
Seriamente comencé a escribir
en 1995 cuando me había decidido a aplicar para ingresar a estudiar
la línea de escritores de la escuela de Skurup. Anteriormente
había sido mayormente una serie de apuntes y grandes deseos de
escribir. Luego me tomó unos tres o cuatro años encontrar
mi propio lenguaje. Significó mucho encontrarme en un ambiente
creativo y conocer a otros escritores.
¿De
qué trata tu poesía?
De haber sido muy introvertido he pasado a girar más y más
en torno al exterior, a observar el mundo desde mi propia perspectiva
para luego escribir sobre lo que veo. No se trata de escribir sobre
las grandes cuestiones de la vida ya que en lo pequeño también
hay cosas interesantes y de valor general. Veo gran cantidad de injusticias
a mi alrededor e intento introducir esto en mis poemas sin apuntar por
eso nada en especial. Luego se trata también de vivir la cotidianeidad:
amores que no funcionan, gatos que quieren comida, dolores de muelas,
sexo y resaca. Además quisiera decir que se escribe demasiado
poca poesía política hoy y me siento culpable de gran
cantidad de autocentrismo.
¿Escribes
solamente poesía?
No. Pero me veo más como un poeta que como otra cosa. Parecería
que esa forma de expresión me viene mejor. Nueve de diez veces
que me siento a escribir resultan en un poema. Inclusive cuando he tratado
de escribir mi diario he terminado en su lugar entallando un poema.
De vez en cuando he publicado poemas y textos cortos de crítica
social bajo el pseudónimo de Klas Thomas.
¿Porqué
justamente esa forma de expresión?
Como lo he dicho antes, parece que me viene mejor. Pero no es una
elección consciente que he hecho diciendo ahora voy a ser
poeta. He comenzado varias novelas pero hay algo que no funciona,
después de unas páginas no puedo seguir. Por otra parte,
con frecuencia mis poemas resultan bastante largos
¿En
qué poetas o escritores te has inspirado?
Me atraen los poetas crudos, aquellos que no se detienen ante el
miedo de ser malhablados. Encuentro mucha poesía
sueca de hoy de muy poco interés. Experimentos idiomáticos
que vociferan con ser prácticamente incomprensibles para el lector
normal. Si tengo que nombrar poetas que han significado
mucho para mí diría el gigante finlandés Pentti
Saarikoski, Bruno K. Öijer, especialmente su última obra,
Tranströmer, Sonja Åkesson, Ginsberg y toda la onda beat.
Hay muchos prosistas que admiro: Paul Auster, Henry Miller, Bukowski,
el holandés Jan Wolkers, Torbjörn Säfve y el fantástico
y añorado Sture Dahlström, etc!!!
¿Cómo
describirías la obra ganadora?
Por mi parte es una cuenta final. Tres años de escribir
comprimidos a 70 páginas. En contenido significa el intento de
captar una vida, juntar sus partes diseminadas e intentar descubrir
cómo juntarlas. Son pedazos de historias de amor y vivencias
de niño, detalles que de alguna manera se han grabado en la mente;
un vehículo abandonado en la playa, un encuentro con una prostituta,
un alcohólico en una calle de Copenhague y otras cosas. Intentar
cerrar la bolsa de viaje y continuar.
¿Cuánto
escribes?
Por períodos mucho. Tengo en este momento una centena de
poemas de los últimos dos años, la mayor parte basura
pero así funcionan las cosas, una gran cantidad de porquería
y algunos granos de oro. He comenzado un nuevo poemario, Vespertino
tardío con carne que es un tanto más oscuro y crudo.
¿Qué
haces además de escribir poesia?
Desde 1999 soy redactor de la revista literaria Serum que ya ha
salido con 15 números. Organizamos algunas fiestas y lecturas
de poesía. Además soy freelance como diseñador
gráfico. Es importante para mí tener cosas paralelas a
la escritura.
¿Porqué
es importante?
A mí no me ha funcionado jamás estar solamente sentado
en el cuarto en casa escribiendo. Es en el encuentro con
otras personas, en el escuchar una conversación en el bar o en
un lugar de trabajo de donde yo saco inspiración. Puede ser igual
de importante y enriquecedor el barrer un parque que el escribir.
¿Qué
significa para tí haber ganado el concurso?
Significa mucho. En parte significa una confirmación el
ser publicado, un recibo por haber realizado algo de valor. En principio
el mismo manuscrito con el que gané fue rechazado por Bonniers
el año pasado. El lector dijo que era poesía de
música para bailar. En lugar de entristecerme me enojé
y quise tomarme la revancha. Y después es especial el acople
a lo latinoamericano, el hecho de ser traducido y de encontrarme con
poetas de esas latitudes. El sueco es un idioma increíblemente
pequeño y el hecho de ser traducido al español como un
poeta no establecido, aumenta los círculos de lectores enormemente.
¿Qué
planes de futuro tienes?
Estamos iniciando el trabajo con dos amigos con una empresa que se llama
Agencia de Información y esperamos que funcione bien. Además
tenemos la esperanza de poder continuar con Serum unos años más
y voy a terminar mi nuevo manuscrito. Espero poder viajar un poco y
posiblemente asistir a más lecturas de poesía.
(Traducción:
Miguel Gabard)